viernes. 29.03.2024

Por J. Lavín Alonso

Una vez más va a ocurrir, si Dios no lo remedia. Un año más nos van a “obsequiar” con esa pantomima, entre céltica y yanqui, del Halloween, en la las víctimas propiciatorias son los niños y quienes corren con los gastos, que presumo nada módicos.. Pero no se aflijan ni acongojen. Volverán otra vez, y muchas más, las citas con el papanatismo, tan regularmente como el decurso de los astros y tan indefectiblemente como la declaración de la renta. O puede que en realidad se trate de una forma más de sacar los cuartos a unas gentes ansiosas de ver sus bolsillos aligerados de euros por mor de unas tendencias sociales repletas de bobería y falta de cautela; ya saben: Día de “esto”, día “de lo otro”, aniversario de “no se qué”, etc. .Y entretanto, el tintineo de los euros entrando en caja no cesa.

Según tengo entendido, la palabra Halloween tiene sus orígenes en la Iglesia Católica. Se trata de una contracción de la expresión inglesa All Hallows Eve – Víspera de Todos los Santos, y hace referencia a una festividad religiosa que se celebra el 1 o 2 de noviembre.

El origen de sitúa en una antiquísima celebración celta en la Irlanda del siglo V AC. El 31 de octubre se conmemoraba allí el final del verano y el inicio de un nuevo año. Al caer la noche, se celebraba la fiesta de los difuntos, dado que existía la creencia de que los espíritus se hacían presentes y rondaban por todas partes. Con el fin de apaciguarlos, los druidas hacían conjuros y se encendían hogueras enormes. Era para ellos la noche en que las fórmulas mágicas y los hechizos eran más potentes.

Con la conquista de las Islas Británicas por parte de los romanos, parte de estos ritos pasaron a la Roma cristiana. Se trató entonces de acabar con las festividades de origen pagano, cosa a la que los irlandeses se resistieron, conservando parte de su antigua celebración de Samahin, por lo cual, la Iglesia Católica cambió esta denominación por la antes citada de All Hallows Eve, convirtiéndola en la celebración de todos los mártires religiosos. Si bien dicha conmemoración tenía lugar en el mes de mayo, las gentes seguían esperando la llegada de los fantasmas a finales de octubre, de ahí que la fecha fuese cambiada al 1 de noviembre.

Hasta aquí una breve historia del acontecimiento, de gran arraigo en los países anglosajones. Otra cosa muy distinta es que, no perteneciendo al acervo cultural de nuestras islas, este teniendo el arraigo que se viene observando de unos años a esta parte. Para que luego digan que el cine y la televisión made in USA, asi como las multinacionales y las grandes cadenas comerciales no tienen influencia. Y a todo esto, los esforzados paladines de lo “nuestro” más callados que un tocino. La globalización de lo banal nos está envolviendo… para mayor regocijo de quienes se lucran de ello. Dado que el "jalouin" no tiene

nada que ver con lo "nuestro" ¿Donde están los reivindicadores de las esencias propias, que no alzan su voz en defensa de nuestras esencias' ¿DONDE?

Halloween10
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